. Rinoplastía
Es uno de los procedimientos quirúrgicos que exige al cirujano plástico el mayor esfuerzo de sus conocimientos técnicos y estéticos. En la consulta se debe reconocer los deseos del paciente, aclarar el alcance de la cirugía y explicar las posibilidades de riesgos o complicaciones inherentes a un procedimiento de esta índole.
La meta a programar es el resultado de una nariz con rasgos agradables con buena funcionalidad. La cirugía consiste en incisiones poco visibles o solo por dentro de la nariz. El cambio propuesto puede ser la reducción de la giba nasal, el levantamiento de la punta, el afinamiento de la base o de toda la pirámide nasal. El plan es único para cada paciente, debiendo guardarse rasgos masculinos o femeninos según se requiera. Además debe lograrse una proporcionalidad de los volúmenes de la cara, ya que la estética nasal está muy relacionada con la frente, labios y mentón, denominada en este caso perfiloplastia. La recuperación lleva una semana con yeso, y otra semana más con una férula con cintas hipo alergénicas.
El resultado final será evaluado al año de la cirugía debiendo guardarse control durante todo ese periodo.
Por último se aclara que otras especialidades han colaborado en el mismo acto quirúrgico como son el otorrinolaringólogo, cirujanos de cabeza y cuello y cirujanos maxilofaciales.